El día 11 de marzo nos visitó el grupo de alumnado del Programa de Currículo Adaptado del Instituto ‘Pablo Sarasate’ de Lodosa, junto con tres profesoras del centro.

A las 9 de la mañana llegaron a La Casa del Bosque, donde cuatro personas voluntarias les han atendido en todo momento (Juanjo Soto, Elvira Corres, José Luis Gambra y Asun Fernández).

En primer lugar se les hace la bienvenida y vamos recorriendo la secuencia u orden con que está creado este centro: el muro del pasado con la raíz de madroño o matacán, el tronco de encina con la cuña de hierro para rajarla más fácilmente, las fotografías de más de un siglo, útiles para usar en el monte y campo, la máquina de hacer chorizo o longaniza y el barreño para “el mondongo”; el hogar donde se ubican los amos de la casa con su tradicional indumentaria, brasero, pan de masa madre, y detrás un apero “el burro” para transportar la leña del monte y “suerte” al carro.

Enfrente de la puerta de entrada, el gran mural de Pablo Nieva que representa en general el bosque a través de un inmenso zorro en cuyo interior se refleja la Sierra de Lóquiz, el referente más significativo de la cara norte de este y Valle de Lana; la fauna diversa y bella incluyendo el lirón (o micharro, o mecherro) en la oreja del zorro; el arrendajo en el ojo izquierdo del mismo, el jabalí en la pata trasera, la mantis religiosa en una de las patas delanteras, amén de un sinfín de plantas y flora muy bien caracterizada junto a la calavera que Pablo dibuja a profusión camuflada entre la flora y fauna del cuerpo del animal.

Muy cerca, la poesía sobre el bosque de Gabriel Celaya que vivió entre nosotros los veranos de la década de los años 60 y 70 en Acedo, y donde se internaba en el bosque para inspirarse y crear poesías tales como la que hemos grabado en este muro junto a varias fotografías de él y con su mujer Amparitxu, sobrina de la señora Mari Cruz, vecina de nuestro pueblo y acogedora como la que más. Así mismo, la pipa que éste fumaba habitualmente donada por un sobrino suyo, Javier, que nos visita cada año con su esposa y dispuestos a echarnos una mano.

En el vano de la ventana, ramitas de enebro, madroño y encina, al lado fotografías hermosas de la flora de nuestro bosque en otoño y del Encino de las Tres Patas de Mendaza, que ha sido considerado como árbol europeo del año y votado por miles de personas de España y de otros países.

Sobre la mesa, una máquina de escribir similar a la que Gabriel utilizó para escribir sus poemas, libros con árboles monumentales de Navarra y otros, lavanda de nuestros mentes, té de roca de nuestro valle, carbón del Valle de Lana y jabón elaborado con éste, pacharán de endrinas, ginebra elaborada con bayas maduras de enebro, manzanilla, tomillo, romero, flores de saúco, y otros.

En el siguiente rincón, el de la niñez, con sus sueños escritos en la pared, alfombras para sentarse y jugar con los animales de caucho y juegos sobre medio ambiente, una rama de encina sobre la cual se halla un cimbel de Félix, cazador de paloma “a parado” y una orguera. Y entre las hojas, una poesía de Inma Biurrun, animales varios y un poco más a la derecha y en el muro del futuro, un mural con las plantas útiles para cocinar y plantas medicinales.

El alumnado ha estado muy atento escuchando las explicaciones de este centro, tanto de la primera sala como de la salita de audiovisuales y la de exposición de los talleres de Acedo, Asarta, Mendaza y Ubago.

Una vez aprendida la lección, la Asociación Estemblo les ha obsequiado con queso de cabra sobre tostada y miel de la zona que todas han degustado y preguntado por las personas que producen ambos manjares (Laura Aramendía el queso de sus cabras, ecológico; y José Luis Gambra, mielero de tradición familiar con una vasta experiencia y sabiduría sobre el mundo de las abejas. Así mismo se les ha ofrecido almendras, dulces y galletas de chocolate.

Los guardabosques también nos han acompañado en esta visita: Juan Mari (su abuela es natural de Ubago, “Sáinz”) y Fran, ambos amables y sabios donde los haya. Tras esta visita y almorzar ambos guardas nos han mostrado huellas de animales que habitan nuestro bosque, cornamentas de ciervo y corzo, cráneos de éstos; un nido de picatronco, plumas de ratonero, una colmena silvestre, y muchas más cosas.

Tras obtener vídeos y fotografías de este momento, nos hemos dirigido al monte de Dérula, seguido un sendero con aportaciones de Juanjo, marcador de la suerte y limpiador de senderos voluntario, de Fran y Juan Mari que nos han explicado aspectos curiosos de plantas diversas (matacán, enebro, jara, encina joven, boj, musgo y liquen, tomillo, romero, violetas, brezo)…

A la vuelta, en el lavadero hemos observado el oasis de mariposas y José Luis Gambra nos ha explicado aspectos importantes de la vida de las abejas y de las colmenas.

Y tras jugar con el agua del lavadero y abrevadero, en el frontón se les ha explicado el palacio de Acedo y su historia de forma breve.

Una vez finalizada la visita, se les ha ofrecido un ejemplar del libro ‘Revivir del valle’ para su aula y otro para la biblioteca del instituto, junto a un bote de champiñón silvestre embotado para obsequiar al grupo de profesoras y directora, que han gestionado esta excursión.

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